Los partos vaginales dejan los tejidos dilatados y con daño en la elasticidad del entorno de la vagina. Este daño produce finalmente una flaccidez interna que afecta en la sexualidad por alterarse la estrecha relación que idealmente debe existir entre ambos sexos al momento de la intimidad. Con técnicas de cirugía plástica se reconstruye la elasticidad vaginal, reduciendo su tamaño y mejorando su retracción interna logrando así la mejor coaptación en su función sexual primordial.
Con el paso del tiempo la progresiva acumulación de grasa bajo la piel da una excesiva proyección de la región pubiana (o Monte de Venus), produciendo un aspecto vultuoso poco femenino de esa zona. La solución se logra con la remodelación de la zona púbica con una fina lipoescultura afinando los tejidos bajo la piel apareciendo nuevamente la silueta de esa zona que había en la juventud.
Por razones de formación genética algunas mujeres desarrollan labios menores de mayor tamaño determinando la proyección excesiva de éstos fuera de los labios mayores, produciendo un aumento de volumen incómodo con la ropa interior que genera un aspecto no deseado. En estos casos se realiza una cirugía que remodela los labios menores logrando el tamaño y aspecto deseados.
Esta intervención es realizada en forma ambulatoria, con mínima alteración de la vida normal.